En Guriri, barrio del municipio de São Mateus, litoral norte de Espírito Santo (estado ubicado en la región sudeste de Brasil), una niña de solamente diez años violada por su tío quedó embarazada. Muy posiblemente la niña lleva ya más de 20 semanas de embarazo. Luego de haber sido atendida en una unidad de salud fue llevada a una unidad de acogimiento institucional y ahora se encuentra bajo la responsabilidad del Estado. Este procedimiento es muy frecuente en Brasil en los casos de violencia o violación de niños y adolescentes. A su vez, la situación de la niña está perfectamente abarcada por el Código Penal Brasileño, en vigencia desde 1940, que garantiza el derecho a la interrupción del embarazo tanto en razón de la violación como también porque el embarazo pone en riesgo su vida.
El caso se volvió público tras un artículo de la sucursal del portal G1 en Espírito Santo el día 8 de agosto y ganó aún más atención con la noticia publicada por el portal Gazeta el día siguiente. Acto seguido la Ministra de la Mujer, Familia y Derechos Humanos, Damares Alves, quien es radicalmente contraria al aborto incluso en los casos de violación, anunció por el Twitter que ya había movilizado su equipo para “ayudar la niña, la familia y hacer el seguimiento del proceso criminal hasta que llegue al final”. En el 10 de agosto dos funcionarios graduados del Ministerio junto con un diputado estadual conocido por su oposición al derecho al aborto estuvieron en São Mateus y han charlado con distintas autoridades.
Tanto la ministra como su equipo han enfatizado que habían tomado medidas para el cumplimiento de la ley para la punición del violador, mientras tanto en ningún momento mencionaron el derecho a la interrupción del embarazo igualmente garantizado por la ley. Así que, teniendo en cuenta las posiciones del Ministerio sobre este tema, no es absurdo suponer que las visitas del equipo en la ciudad pueden haber implicado en algún tipo de presión sobre actores institucionales involucrados con la resolución del caso.
En el 12 de agosto, en una nueva noticia del diario Gazeta, la Secretaria de Asistencia Social de São Mateus declaró que la interrupción del embarazo estaba bajo análisis de los equipos técnicos y dependía de una autorización judicial. Esa medida judicial se hace necesaria porque la niña está bajo responsabilidad del Estado. Si acaso estuviese bajo los cuidados de su familia la autorización no sería necesaria una vez que basta con tener un informe médico y el consentimiento de los responsables legales. Por lo cual el acogimiento de la niña en una unidad institucional estatal ya configura una violación de derechos pues limita automáticamente la autonomía de las personas que son responsables por ella – y al mismo tiempo de la propia niña – en relación a decidir sobre llevar o no el embarazo a termo.
Tenemos información segura que tanto la niña como su representante legal han elegido por la interrupción del embarazo tal como está garantizado por el Código Penal (Decreto Ley nº 2.848 de 7 de diciembre de 1940). Pero la niña se está bajo custodia del Estado, así que el escenario no es muy favorable: en la peor de las hipótesis la autorización judicial puede simplemente ser denegada, por otro lado, el proceso puede arrastrarse mucho postergando el procedimiento médico que lo haría algo arriesgado o aun mismo volviéndolo imposible, todo eso resulta de grave infracción de los derechos humanos de la niña y pone en riesgo también quién es responsable por ella.
No obstante, a pesar del escenario, es necesario decir que las autoridades judiciales y sanitarias locales están hasta el momento respondiendo las demandas del caso basados firmemente en la legislación vigente y teniendo en cuenta parámetros técnicos necesarios. Nuestra prioridad es emplear todos los esfuerzos posibles para que los derechos de la niña sean plenamente respetados. No consideramos que haya en ese momento razón para una campaña amplia de repudio a la violación de derechos por parte del Estado brasileño. Hay señalespositivos que el los derechos de la niña serán respectados. Sin embargo, si considerado el peso de as presiones conservadoras tanto del aparato estatal como de la sociedad, ese riesgo no está completamente ausente del horizonte. Estamos preparadas para accionar una campaña de denuncia y tomar las medidas correspondientes caso eso sea necesario.
Por otro lado la campaña #GravidezAos10Mata ha alcanzado los trending topics del Twitter Brasil y circula una llamada a la acción para firmar una petición (que cuenta ya con más de 600 mil firmas) disponibilizada en la plataforma Change.org para que se garantice el derecho de la niña a la interrupción del embarazo. Rogamos que ustedes firmen la petición y ayuden a replicar la campaña. Vamos seguir informando sobre los desdoblamientos del caso y nuevas acciones siempre que sean necesarias. Contamos con a solidaridad de ustedes.
Embarazo y maternidad infantil forzada es tortura.
Informe elaborado por
Anis
Campanha Nem Presa Nem Morta Cfemea
Cladem Brasil
Doctors for Choice Brasil
Frente pela Legalização do Aborto ES Fórum de Mulheres do Espírito Santo Grupo Curumim
SPW
Repercusión en los medios sobre el caso
O Globo – https://outline.com/22V8n4
El País – https://brasil.elpais.com/brasil/2020-08-15/estuprada-desde-os-6-gravida- aos-10-anos-e-num-limbo-inexplicavel-a-espera-por-um-aborto-legal.html?
Huffington Post – https://www.huffpostbrasil.com/entry/estupro-menina-dez- anos_br_5f37130ac5b6959911e48a6e
Tribuna de São Mateus: https://tconline.com.br/flaes-afirma-que-gravidez-infantil- forcada-e-tortura/
Extra – https://extra.globo.com/casos-de-policia/avaliacao-de-aborto-para-crianca- estuprada-causa-polemica-gravidezaos10mata-24585599.html