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Carta de ABIA en repudio a la censura de la campaña sobre prostitución y VIH/SIDA por parte del Ministerio de Salud
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Río de Janeiro, 17 de junio de 2013
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Estimados amigos y amigas,
ABIA, Asociación Brasileña Interdisciplinaria de SIDA, organización fundada por el sociólogo Betinho en 1987, está acompañando y posicionándose públicamente, desde el 4 de junio de 2013, cuando fue anunciada por el Ministerio de Salud la censura a la campaña sobre prostitución y VIH/SIDA lanzada en ocasión del Día Internacional de las Prostitutas, celebrado el 2 de junio. La censura, ampliamente divulgada y criticada, señalizó, de forma directa y explícita, la violación de los derechos de cada una de las mujeres protagonista de la campaña, de las prostitutas en general y a nuestro entender, de toda la sociedad brasileña.
A lo largo de los 25 años de enfrentamiento a la epidemia en Brasil, ABIA ha desarrollado una serie de investigaciones e intervenciones junto a diferentes grupos de población. Lo que hemos observado a partir de eso es que, situaciones de prejuicios, discriminación y violencia que inciden sobre las vidas de personas que, por su trabajo, identidad de género u orientación sexual son excluidas de espacios que deberían asegurarles acceso a la salud, educación, derechos laborales, entre otros, pueden traer serias implicaciones en el manejo individual y colectivo de protección frente al VIH/SIDA.
Al ceder a las posiciones moralistas y conservadoras en detrimento de innúmeras referencias científicas acumuladas por la producción nacional e internacional en el campo – postura observada con frecuencia a partir de medidas de censura acerca de los derechos sexuales y sus relaciones con el enfrentamiento de la epidemia de SIDA -, el Ministerio de Salud contribuye directamente para el aumento de factores negativos que marginalizan a determinados grupos poblacionales. Esta práctica, por consiguiente, coloca esos grupos como categorías distintas de aquellas que merecen ser consideradas como humanas, luego, sujetos de derechos humanos, en la medida en que se reconoce solamente parte de su existencia y se niegan sus posibilidades de escoger. Esta fragmentación del sujeto, sin embargo, no combina con la atención integral en salud propuesta por las directrices de políticas públicas en el área y a partir de la implementación del Sistema Único de Salud (SUS) en Brasil.
En un país con elevadas tasas de desigualdad social como es el caso de Brasil las vulnerabilidades y las violencias estructurales se sobreponen y se multiplican, generando un desafiador contexto, en el cual la combinación entre afirmación de derechos y políticas públicas de salud deberían cada vez más ser real, lo que exige, a su vez, acción política e participación social.
En el reciente episodio del Día Internacional de las Prostitutas, derechos básicos de participación de la sociedad civil en la formulación de estrategias de prevención fueron violados. Además de eso, se permitieron brechas para que grupos que actúan contra la práctica profesional de las prostitutas se sientan confortables para expresar sus actos de odio y violencia.
Queda evidente en este contexto un acto de violación explícita del derecho humano a la salud, conquistado y legitimado por el Estado brasileño. En este sentido, la sociedad civil cobra un posicionamiento por pate de instancias gubernamentales defensoras de los derechos humanos en general y, en particular, del derecho de las mujeres. Una solicitud dirigida a la Ministra jefe de la Secretaria de Derechos Humanos y a la Ministra de la Secretaria de Políticas para las mujeres de la Presidencia de la República solicita que ambas se posicionen, a partir de sus agendas, y retomen la propuesta de colocación/divulgación de la campaña como una expresión de los derechos fundamentales.
ABIA, así como un conjunto de organizaciones de la sociedad civil, ONGs, profesionales de salud y universidades que integran el movimiento social del SIDA en Brasil, expresan su indignación y su preocupación frente al direccionamiento conservador de la política de enfrentamiento al VIH/SIDA asumido por el actual gobierno. La tendencia estigmatizadora y restrictiva asumida por el Ministerio de Salud en 2013 refleja un retroceso ya observado en los últimos años. Los resultados positivos de la respuesta brasileña al VIH/SIDA están fuertemente amenazados. Activistas e investigadores/ras internacionales dirigen sus miradas para el escenario brasileño, no más en busca de inspiración y aprendizaje, si no horrorizados/as y preocupados/as con el camino de la subyugación del gobierno a los intereses religiosos y sobre todo, particulares.
Afectuosamente,
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Richard Parker
Director Presidente de ABIA